Sebastián Sichel: “Repudio la lentitud que hemos tenido para entregar más atribuciones a las regiones”

El próximo 18 de julio se desarrollarán las primarias presidenciales de Chile Vamos, sector que cuenta con cuatro precandidatos. Uno de ellos es el independiente Sebastián Sichel, quien se encuentra en plena gira por el sur del país con el objetivo de robustecer su propuesta programática.

En ese contexto es que el ex ministro de Desarrollo Social bajo la administración Piñera, visitó esta semana La Unión y Valdivia para reunirse y dialogar con adherentes en las principales plazas de cada comuna, además de sostener diversas reuniones de trabajo.

¿Cuáles son los objetivos de su visita a la región de Los Ríos?

- Primero por una convicción personal. La política tiene que ser con más bototos y menos corbata, es decir, preocuparse más de estar en terreno, en la calle, escuchando los problemas de las personas y viendo cómo los solucionarlos, que estar encerrado en la sede de los partidos o en el barrio oriente de Santiago.

Quería hacer una gira ciudad por ciudad, de manera de escuchar y ver cómo nosotros podemos ir ajustando nuestras propuestas de campaña. En cada comuna estuvimos en la plaza pública conversando con personas y escuchando cómo podemos mejorar el país, y mi convicción final es que tenemos que devolverle la democracia a las personas, poner a las personas en el centro, y menos en los partidos y en las cúpulas en Santiago.

¿Cómo evalúa la recepción?

- Me emocionó que en cada plaza había gente esperándonos, con banderas. Nosotros hemos armado una red de más de seis mil voluntarios en Chile, que activamente se han inscrito. También tenemos mucha gente de los partidos políticos de Chile Vamos. Hay mucho entusiasmo en esta idea de que hay que mirar hacia una política de futuro, menos concentrada en el pasado, con menos líderes del pasado, y más orientada en discutir lo que viene.

¿Cómo valora el alza que ha experimentado su candidatura en las últimas encuestas?

- En lo personal es un orgullo tremendo. Toda mi vida he luchado por salir adelante, y es bonito que la gente reconozca el trabajo que he hecho para mejorar la vida de las personas, y sobre todo cuando compito con personas que llevan 30 o 40 años dando vuelta en cargos políticos. Además es simbólico que la primaria de Chile Vamos se esté definiendo entre Joaquín Lavín y yo, un político que ha construido una historia en Chile pero que también ha estado mucho tiempo en la palestra, y alguien nuevo que quiere mejorar la política con gente nueva, independiente, y con capacidad de interpretar mejor a Chile. No verlo desde Las Condes, sino que entenderlo desde las regiones.

¿Considera que usted es el gran rival de Joaquín Lavín?

- Yo siempre he sentido que es así, y hoy las encuestas marcan que la primaria va a ser entre los dos. Eso nos pone un desafío gigante de convocar a mucha gente a votar. Debemos demostrar que somos una alternativa al proyecto de izquierda para Chile. Para que más gente confíe, y crea que hay una mejor alternativa que la izquierda, debemos tener un proyecto distinto a ellos, e invitarlos a votar, pero no por miedo al comunismo, sino que por entusiasmo a que las ideas de la libertad van a ser masivas.

Independientemente del ganador de la primaria, ¿cómo proyecta las opciones de la centro derecha en las próximas presidenciales?

- Va a depender de lo que hagamos en la primaria. Si tratamos que vote poca gente, o que voten por nosotros por miedo al comunismo, vamos a perder la elección presidencial. Lo que necesitamos es entusiasmar a mucha gente, y mostrarle que tenemos un mejor proyecto para el país.

¿Siente que lo perjudica haber sido ministro de Sebastián Piñera?

- Para nada. Yo estoy orgulloso de haber sido ministro, de haber sido el ministro mejor evaluado, y estoy orgulloso de mi trabajo. Mi gran desafío es convencer a las personas que uno vota por cómo van a ser los próximos cuatro años del país, y no por cómo fueron los cuatro años anteriores. Debo convencerlos de que soy la mejor opción de futuro, sin renegar quien soy. Yo vengo del centro político, alguna vez milité en partidos y me aburrí, soy independiente, fui ministro del Presidente Piñera, fui presidente del Banco Estado, y siendo lo que soy creo que puedo contribuir a hacer mejores cosas para Chile. Uno tiene que contar su historia y estar orgulloso de lo que ha hecho para ser creíble.

PROPUESTAS

¿Cuáles son los ejes de su propuesta programática?

- Son cuatro fundamentales. Uno es el combate frontal a la burocracia, que permita facilitarle la vida a las personas; nunca más filas y colas en el Estado; nunca más permiso para emprender que dificultan el emprendimiento. Lo segundo es una política que cree en las empresas y el emprendimiento abiertamente. La tercera es apoyar a las personas en sus gastos diarios, como por ejemplo, garantizar a todas las mujeres de Chile que reciban una pensión de alimentos para sus hijos; o ayudar muy directamente en devolverle el IVA a la mitad de los hogares en Chile.

También quiero construir un gabinete que represente mejor a Chile, nunca más con personas que estudiaron en los mismos colegios, en las mismas universidades y que pertenecen a las mismas elites, sino que tendré un gabinete que represente las ideas de la libertad pero que hayan nacido en regiones, estudiado en colegios públicos, y que sea diverso. Mientras no tengamos gobiernos diversos, siempre vamos a tener autoridades que no entienden el país en que vivimos.

Lo último es la inclusión territorial. Yo creo en la regionalización, repudio la lentitud que hemos tenido para entregarle más atribuciones a las regiones, tenemos que dejar de infantilizar a las regiones y creer que todas las decisiones se tienen que tomar en Santiago. Medidas tan absurdas como que en el sur los restaurantes atiendan en terrazas, o que se entreguen permisos de desplazamiento de dos horas cuando en cualquier zona rural uno sabe que se demora al menos una hora en llegar al centro de la región, demuestra que hemos hecho la peor de las fórmulas para tratar a las regiones.

Lo que tenemos que hacer es entregarle todas las decisiones de carácter territorial a las regiones, y también aumentar del 8% actual para que el 25% del presupuesto de Chile que se entregue directamente a las comunas. Es la mejor forma de evitar burocracia.

¿Cómo valora la elección de gobernadores regionales?

- Si antes Santiago veía infantilmente a las regiones, ahora avanzó un paso y los miran como adolescentes. El desafío más grande es tratarlos de igual a igual, no sólo que tengan una autoridad para que opine, sino que también entregarle las atribuciones para que tome decisiones junto a los municipios y vecinos de las regiones.

“FUE UNA DEMANDA GIGANTE DE ROSTROS E IDEAS NUEVAS..."

Consultado por su interpretación de los recientes resultados en la elección de constituyentes, Sebastián Sichel comentó que “fue una demanda gigante de renovación, de rostros e ideas nuevas. Yo lo acepto como un tremendo mensaje para que hagamos las cosas mejor, nos preocupemos más de las personas y que tengamos nuevos liderazgos para que no sigan gobernando los mismos de siempre, con las mismas ideas y las mismas peleas de siempre. Lo que hicimos mal fue quedarnos anclados en los líderes, ideas y peleas del pasado que han contribuido bien poco al bienestar de las personas”. ¿Fue una derrota para la centro derecha? El precandidato sostuvo que “perdieron todos los partidos tradicionales, y ganó una nueva política. La izquierda logró representar mejor esa nueva política porque no le tuvo miedo al cambio, ni a la renovación, buscó la renovación y gente nueva. Nosotros perdimos porque le tuvimos terror al cambio, y los cambios son buenos, si se dirigen bien”.